31/12/08

2008

Este año que termina me a dejo un montón de cosas buenas, de esas que jamas se podrían olvidar, así que hoy quiero agradecer a Dios algunas de las tantas cosas que me permitio vivir, contarlas todas seria de nuca terminar, así que:
  • Gracias por permitirme comenzar el año 2008 con salud, trabajo y amor.
  • Gracias por la bendición de mi matrimonio (05 de Abril) con el hombre mas maravilloso del mundo (bueno tiene algunos defectos pero nada del otro mundo)
  • Gracias por la firma de las escrituras de nuestra casa.
  • Gracias por el mes de vacaciones que me diste, lo disfrute muchisimo.
  • Gracias porque encontré trabajo cuando creí que batallaria en hacerlo.
  • Gracias por la salud de todos nosotros.

Estas son solo algunas cosas por las que hay que agradecer, aunque hubo algunos otros eventos que me dolieron y me asustaron como:

  • La muerte del abuelito de Toño, que la verdad en los 5 años que la vida me permitio conocerlo, le tome un cariño muy especial que cuando lo veía siempre me acordaba de mi abue que ya se había ido al cielo.
  • La hospitalizacion de Toño me dio muchisimo miedo, esos 5 días fueron los mas angustiantes de todo el año, sentía que me dejaba sola.
  • El cierre de la empresa en la que labore por 6 años, me entro una especie de depresión que llegue a pensar que no encontraría trabajo.

En fin son tantas cosas que ahora quiero desearles un excelente año que este lleno de mucha salud, mucho trabajo y mucho amor, que logremos cumplir todos nuestros sueños y que Dios derrame muchas bendiciones para todos.

Esta es una oración que me encanta y creo que es excelente para estas fechas y para todos los días agradecer a Dios por todo lo que tenemos.

Es Maravilloso, Señor, mis brazos perfectos, cuando hay tantos mutilados; mis ojos perfectos, cuando tantos no tienen luz; mi voz que canta, cuando otras enmudecen; mis manos que trabajan, cuando otras mendigan.

Es Maravilloso, regresar a casa cuando otros no tienen a dónde regresar; es Maravilloso sonreír, amar, soñar y vivir; y cuántos hay que lloran, odian, se revuelven en pesadillas y mueren antes de vivir.

Es maravilloso, tener a Dios para creer; y cuántos hay, que ni siquiera poseen el consuelo de una creencia.

Es Maravilloso, sobre todo Señor, tener tan poco que pedir... ¡ y tanto que agradecer !